Este blog, nace de la necesidad imperiosa de no tener necesidad y con el propósito de no tener propósito, éste blog es una equivocación. Por lo tanto, cuándo yo lo actualizo y tú lo visitas, este blog adquiere un sentido y una utilidad que no debería tener. No hay dada más triste que no alcanzar el fracaso, sin embargo, en defensa propia diré que asumo el estrepitoso fracaso de no haber fracasado.